7/11/08
Estados alterados
*
Despertó con ese sentimiento extraño , como cuando uno pisa a su mascota preferida y no sabe que hacer para que ésta entienda que fue un accidente.
Que no había intención.
Preparó su desayuno mecánicamente y aún sentía el dolor que le había causado a su mascota como propio , aunque nada había ocurrido.
Deambuló con pesar infundamentado y dolor verdadero.
Miró su casa como un ladrón sin motivos.
Todo le era inocuo.
Ya nada importaba.
Sería pasajero , todos los setimientos lo son , pero era ese tránsito , ese prolongado aunque momentáneo tránsito , esa sensación de infinita desazón que lo acongojaba sin tregua ... ya le resultaba insostenible.
No por conocido menos detestable.
Otro naufragio más.
Lo sobrevivría , era evidente.
Sólo necesitaba el disfraz apropiado y la coartada justa.
Tragó el resto del café de tres tragos continuos.
Se vistió , pateó el gato y se fue a trabajar.
*
Suscribirse a:
Entradas (Atom)