Mrs. Bradford.
La casa de enfrente está a la venta.
Su dueña murió hace como un mes y recién me entero.
John cuando la vio me dijo "let´s get in". Pero dije que no , tenía miedo ,obvio , siempre tengo miedo , pero más que eso. No me pareció buena idea. Esa casa era de alguien que conocía.
Estaba acostumbrado a llegar de trabajar y verla a ella , así , como de 60ta y pico , sentada en el escalón de su casa , con una frazada en las piernas y tomando vino blanco en una copa. Miraba atardecer y estaba sola.
Era alcoholica. Tenía los ojos vidriosos de beber , pero yo lo atribuía a los atardeceres naranjas de California.
Son tan tristes!.
Creo que el marido la dejó o algo por el estilo.
Un abandono más. Esas cosas pasan.
El amor también se termina , y cuando el aguante se agota , uno se va. Es normal pero muchas veces algo injusto. Que se yo de amor... es solo una opinión.
Siempre me decía "hi Nelson , how was your day?". "Work , as usual" , le decía. "Yeah , working sucks too" , me respondía , lo que me hacía suponer que no hacer nada y beber vino mirando al cielo , también era una porquería. Me daba tranquilidad , no me había perdido de nada entonces.
Siempre olvidaba su nombre , y hoy a la hora del recuerdo , es lógico que tampoco lo recuerde. Tenía uno de esos nombres americanos , Tracy , Maggy , Peggy o Mrs Bradford. Que importa! , es solo un muerto más.
Yo le había pasado un gato , hace años , que había aparecido en mi casa , y no lo podía tener , eran tiempos duros , los perros de la casa de al lado son unos salvajes y tener que vivir con los nervios de que le pasaría a Lamary o encontrarla muerta y despedazada , hubiese sido demasiado.
Se la di con una bolsa de "whiskas" y una pelota de tela.
A Lamary le gustaba dormir en la mesada de mi cocina y mirar a los perros por la ventana. Pero también le gustaba dormir bajo el rosal blanco de "Mrs. Bradford".
Ella la acariciaba mientras se volvía naranja justo cuando el sol está tan bajo que pasa por debajo de los árboles de palta de mi casa. A la hora que llego. La hora de bañarse , mirar tele y comer pan con coca cola , una manía secreta.
Debí suponerla enferma , muchas mañanas la vi caminando , dando vueltas a la manzana en compañia de su hija. Las dos vestidas de equipos deportivos rosados. "Mrs. Bradford" se recostaba mucho a su hija , como si le costara caminar o necesitara un abrazo que su hija no correspondía , pero la guíaba de todas maneras en su paso lento.
Era la única persona en mi barrio que sabía mi nombre , y eso me otorgaba existencia.
Y ahora no está , la casa está a la venta , y no veo a Lamary por ningún lado.
Debí entrar a la casa con John y saber así algo más de ella.
Pero creo que ya no importa.
Ella murió y con ella se llevó mi nombre.
Vuelvo a ser nadie en ésta calle.
Vuelvo a no existir para los demás.
Y yo sin gato.
